Notas dispersas


fotograma. Fraser/Campion

Aquel cuyo nombre fue escrito en agua

Fecha de escritura: 15/03/11
Publicación: HM


El tema del silencio inquieta a Jane Campion. En In the cut (2003) parece que todos los personajes murmuran; The piano (1993) narra la historia de una pianista muda con la ya célebre música de Nyman; en Bright Star (2009), su más reciente producción, se explora a John Keats (1795-1821), como quien intuye que el silencio y la poesía son indisolubles. El resultado: una película repleta de elementos: copas de árboles, frío, caricias, un cuarto con mariposas recolectadas, flores, un gato, amor, celos, muerte, paredes, ventanas, y en el fondo la vida, intensa, frágil, de dolor y ternura. 
Esta condición de lo sencillo también la defendió, en otra época y lugar, Roque Dalton: “Yo, como tú, / amo el amor, la vida, el dulce encanto / de las cosas, el paisaje / celeste de los días de enero…”. Campion logra plasmarla en una obra audiovisual, favorecida por las actuaciones y la fotografía, de modo congruente con la vida y obra del poeta Keats, quien creía que “el hombre no debe discutir ni pretender tener la razón, sino simplemente limitarse a susurrar las cosas al oído de quien está a su lado”. 
Así como la mente del genio matemático habría de estar poblada de números, algoritmos y conjeturas; la del ajedrecista de alfiles, caballos y movimientos; así la mente de Keats fue henchida de versos y en versos pensaba y percibía el mundo. De este modo vivió y consumó una obra extraordinaria que habría seguido madurando de no haber fallecido a los veinticinco años. 
Para continuar el deslumbramiento que induce Campion para Keats y la sensación a la vez de vértigo y éxtasis cuando uno se hunde en su poesía dejo algunos subrayados o fragmentos de su obra, de sus versos que así avanzan: 

Pero aunque su rostro estaba límpido como los ojos de un niño
y aunque permanecía sonriendo ante el sacrificio, 
el poeta lloró ante su piadoso destino,                                                                                

lloró porque tal belleza estaba condenada a la desolación…

de "Lugares de verdes estancias para los poetas hechos"

¡Detente y considera! la vida no es sino un día, una gota frágil de rocío en su peligroso camino desde la cima del árbol. 
La vida es la esperanza de la rosa mientras no se ha abierto.

*

Una regadera de luz sin drenaje 
es la poesía; es el poder supremo...

de "Sueño y poesía"

¿No has notado un fulgor a través de las olas
de diversos brillos? Es el edificio
del que te he hablado, donde reposa la hermosa Escila;
y donde he guardado con piedad
a todos los amantes, condenados a muerte por las tormentas caídas
durante mi cautiverio. 

*

Se levantó un murmullo, como nunca se oyó en todas las angustias de
vientos y mares: describirlo sobrepasa el ingenio humano; marea, pensarlo.

*

…porque yo levanté a las criaturas desmayadas en el salvaje desierto.

de "Endymion"

Osado amante, nunca, nunca podrás besarla,
aunque casi la alcances…

*

¡Dichoso amor! ¡Dichoso amor, aun más dichoso!
Por siempre ardiente y jamás saciado,
anhelante por siempre y para siempre joven;
cuán superior a la pasión del hombre
que en pena deja el corazón hastiado,
la garganta y la frente abrasadas de ardores

*

Oh diminuto pueblo, por siempre silenciosas
tus calles quedarán, y ni un alma que sepa
por qué estás desolado podrá nunca volver.

*

La belleza es verdad y la verdad belleza. Nada más
se sabe en esta tierra y no más hace falta.

de "A una urna griega" (traducción de J. Cortázar)